La mirada y la interpretación de Oscar Andrés De Masi, arqueógrafo

martes, 16 de junio de 2020

BICENTENARIO DEL FALLECIMIENTO DEL GENERAL BELGRANO



BUSTO DE DON MANUEL BELGRANO en la Casa Central del Banco Provincia

Por Oscar Andrés De Masi
Para Viaje a las Estatuas
Junio 2020

Foto gentileza Museo y Archivo Históricos Bapro.



La obra:

El busto, realizado por Juan Carlos Ferraro en bronce (de 87 x 52 x 52 cm), se ubica en el amplio ex salón operativo de la Casa Central, haciendo pendant con el busto del Gral. San Martín (obra de Manuel Alejandro de Llano). Dos piezas de la Colección del Banco, de singular interés, que, seguramente, hemos visto tantas veces, mientras aguardábamos en la fila de cajas. Al menos, en mi caso, siempre me llamaron la atención, por la calidad de su modelado, por la evidente "voluntad de forma" vanguardista de su lenguaje, y por el sentido de homenaje institucional a dos próceres indiscutidos. Su sola presencia en un espacio tan privilegiado, recapitula esa constante en la agenda cultural del Banco, que fue la mirada histórica y el aprecio artístico.

He aquí un retrato de Belgrano. Pero no me animaría a etiquetarlo como un "vivo retrato", maguer su intención figurativa: los rasgos han sido trazados con marcada estilización y geometrismo, dotando al rostro de un cierto hieratismo inmóvil (obsérvese las cuencas vacías de los ojos, la perfecta simetría de la sinuosa comisura de los labios, el eje marcado por la línea recta de la nariz) que parece reconciliar el lenguaje moderno de la técnica con cierta expresión clásica, tal vez más arcaizante que academicista.

El busto postula una representación del prócer en su faceta civil, luciendo la característica "chorrera" con que se lo ha retratado frecuentemente: un adorno volante de tela que guarnecía la tira de ojales de la camisa y cuyo nombre alude a la semejanza con la forma de un líquido cayendo sobre la pechera. Se la puede ver, por ejemplo, en el famoso óleo pintado en Londres en 1815.

El recurso expresivo elegido por el artista, tanto para el modelado de la figura como para el atractivo acabado de la superficie del metal (el color de la pátina es un aspecto notable) ofrece una resignificación reconocible de los rasgos y el atuendo de Belgrano en los años de su tarea como secretario del Consulado de Comercio (desde 1794) cuya sede se ubicaba, precisamente, en el solar que hoy ocupa la Casa Central del Bapro.

Ello confiere a la escultura y al tributo que ofrece, un valor de consistencia con la memoria inmaterial del lugar donde se emplaza, que goza de una declaratoria nacional.

Aunque, también, podría tratarse del momento en la vida de Belgrano de su desempeño diplomático en Londres (1814-1815), cuando, ya más maduro, fue retratado en el mencionado cuadro, luciendo la chorrera a la moda, y con rasgos faciales (cejas delgadas, labios  finos, nariz afilada) y peinado (el rulo que cae sobre la frente) muy similares a esta cabeza.


El autor:

Juan Carlos Ferraro fue un prolífico escultor y medallista argentino contemporáneo (BA. 1917-2004). En los años de su formación trabajó en el taller de Luis Perlotti. Fue, además, aficionado al tango y al lunfardo. Sus obras abordan la temática patriótica, popular y funeraria, y se hallan en numerosos espacios públicos del país: edificios gubernamentales, plazas y parques, cementerios etc. También hay obras suyas en el exterior.
Ferraro tuvo ocasión de retratar a Belgrano, además, en una medalla (el prócer luce uniforme militar), y en un busto destinado al Salón Blanco de la Casa de Gobierno, cuya encomienda obtuvo por concurso.


Nota de agradecimiento:
La información relativa a las medidas del busto, me fueron facilitadas por el Archivo y Museo Históricos del Bapro.
La fecha de nacimiento de JCF (que ha sido motivo de discrepancias en algunas biografías) me fue confirmada por la familia del escultor.